UNIDAD ESENCIAL
En el Principio, cuando estábamos en absoluta consciencia de Dios, comíamos y bebíamos todos ese la misma "Esencia Interna", sin separación ni exclusiones; éramos iguales en un mismo "Principio Divino Universal". Todos somos esencia de un mismo "Principio Divino Universal", iguales en naturaleza. Es la personalidad la que genera la ilusión de que se es distinto a los demás, de izquierda o de derecha, creyente o ateo, capitalista o proletario.
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Jesús, cuando instaura la comunión, no discrimina ni pone condiciones: "a estos sí" o "a estos no"; insta a que comulguen todos juntos, sean católicos, judíos, islámicos, orientalistas, buddhistas, esotéricos, nueva era o metafísicos; de primer mundo, de segundo o tercero; púdicos o impúdicos, honestos o corruptos.
Comulgar permite concienciar que todos somos uno en la Presencia Crística, en afecto hacia humanos, animales, plantas y piedras por igual.
Fragmentos extraídos del libro "Cuarta Iniciación Mayor" de Rubén Cedeño publicado por Editorial Señora Porteña
