AGUJEROS EN TU ROPA

Hay que liberarse de todas las situaciones tóxicas con la verdad, no ocultándolas ni disimulándolas. Ocultar es una tortura; ser real es un placer. Hay personas que hablan mal de un país, de la gente, la botan de su casa, no cumplen con los convenios y compromisos contraídos, y después aparentan se nobles, cultas, inteligentes o maestros de Metafísica. Hagan lo que hagan, se verá la virtud o la falla en sus rostros. Pero hay quienes creen que los demás no lo ven y que pueden engañar.

Quien quiere hacer ver de sí mismo asuntos que no tiene es un mitómano y necesita ayuda psicológica. El que es de cierta manera, sea calificada como buena o mala, como virtud o defecto, no necesita hacerle ver esto a nadie ni disfrazárselo, porque se le ve sin ningún esfuerzo. Imagina qué placer ser culto, bueno, noble, inteligente, refinado, que todo el mundo te trate como lo que eres y que tú se lo devuelvas a los demás de igual manera. Eso sucede y es por demás placentero.

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Un filósofo griego llamado Antístenes quería que todo el mundo creyera que era humilde y se puso una vestimenta con agujeros; cuando Sócrates lo vio, le dijo: "A través de los agujeros de tu túnica se ve tu orgullo". Todo el mundo tiene agujeros en su túnica y deja ver lo que es, no importa lo que trate de aparentar o diga de sí. La ignorancia, la hipocresía, la traición, el orgullo, ese ven, son obvios, se irradian, y es inútil que la persona diga que es lo contrario o las disimule. (...). Recuerda esto y no te engañes no importa adónde vayas o te escondas, a través de los agujeros de tu ropa siempre se verá lo que eres y estarás echado a la calle.