1. Los pensamientos, las palabras y las acciones positivas, constructivas, son lo primero a cultivar en una “Vivencia Espiritual”, y más todavía en el desenvolvimiento de la Primera Iniciación; los tres están indisolublemente encadenados por la actitud mental.
2. Si el pensamiento es positivo, las palabras y las acciones también lo serán; y si, por el contrario, es negativo, lo demás también lo será.
3. Existen tres rectitudes básicas que se desprenden del Noble Óctuple Sendero, revelado por el Señor Gautama, que son: “PENSAR POSITIVO”, “VIVIR POSITIVO” Y “ACTUAR POSITIVO”. Dice el Maestro El Tibetano: “En la Primera Iniciación se establece una estructura para el Recto Vivir, el Recto Pensar y la Recta Conducta”.
4. Las Ocho Rectitudes –o el Noble Óctuple Sendero expuesto por el Señor Gautama- necesarias para la Primera Iniciación, tienen que dejar de ser un hermoso enunciado para el participante, y pasar a convertirse en ocho acciones en su vida:
I. Pensar Positivo.
II. Hablar Positivo.
III. Acción Positiva.
IV. Ganarse la vida Positivamente.
V. Observación Positiva.
VI. Meditación Positiva.
VII. Comprensión Positiva.
VIII. Esfuerzo Positivo.
Extraído del Libro “PRIMERA INICIACIÓN”, de Rubén Cedeño.
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