MAR DE GALILEA
El Mar de Galilea conocido también con el nombre de Tiberíades, es en realidad un lago interior tan armónico de azules aguas, oleaje tan delicado, que sus costas dibujan la forma de un arpa y que por eso también es llamado con el sonoro calificativo de Kinneret, con el que se designa a este instrumento musical en Israel. Es el lago de agua dulce más bajo del mundo, lo que encierra un gran significado, que es las dulzuras de las profundidades más recónditas del inconsciente y como tal es la mayor reserva de agua dulce del Estado de Israel. Está alimentado por el Río Jordán y comparte sus costas entre Israel y Jordania; y como una guirnalda está adornado por los Altos del Golán y las Montañas de Galilea. En el Mar de Galilea y sus costas Jesús vivió, hizo sus mayores prodigios y dijo las más grandes Enseñanzas de su ministerio, por eso aquí se siente la presencia de Jesús sin hacer mucho esfuerzo. Ningún otro Mar en el mundo como el Mar de Galilea, puede presumir de los sucesos que acontecieron en él. Teniendo por escenario el Mar de Galilea, Jesús vivió en la casa de Pedro y en una piedra lo nombró sucesor de su enseñanza, dijo el Sermón del Monte, hizo la multiplicación de los panes, caminó sobre las aguas, calmó la tormenta, sacó espíritus inmundos; realizó la pesca milagrosas y tantas cosas más. Al Mar de Galilea, no se viene a buscar nada externo, se acude a meditar, a bañarse en esta sublime radiación, pacificarse con su suave oleaje y a deleitarse en sus azules aguas, además de contar, que a pocos kilómetros de él, en Siria, Jesús resguarda su cuerpo físico tangible y visible para cuando lo necesita usar.
Bien sea para navegar o recorriendo las orillas del Mar de Galilea, trato siempre de traer la mayoría de estudiantes espirituales que sea posible, para instruirles de las maravillas de los saberes que surgieron y los prodigios que se realizaron en este lugar y que se lleven estas bendiciones para repartirlas a todas las personas del mundo que les sea posible, a ver si de esta forma, se contribuye, aunque sea en una micro millonésima parte, en el mejoramiento de parte de la humanidad. Y si esto se logra, es posible que algo se haya hecho por el progreso del mundo.
Foto: Navegando el Mar de Galilea con los Altos de Golán y Rubén Cedeño.