El Dios Padre-Madre en su Gran Sabiduría, permite que la sustancia misma de su Ser fluya a toda vida en todas partes, sosteniendo la Máxima Perfección en todo momento, sin reconocer nada que sea inferior a su Sublime Estado.
La Gran Luz Cósmica fluye desde el Corazón de la Creación y va reduciendo su frecuencia vibratoria de modo que cada Canal o Distribuidor que ha calificado para ser representante de un Rayo en Particular, pueda, a su vez, disminuir la intensidad de la radiación, de modo tal que esta pueda ser recibida en la Esfera inferior, y, una vez allí, ser aceptada y dispensada por otra Individualización Calificada.
Existen Representantes de todos los Rayos en todas y cada una de las Esferas, para que la Perfección planificada por el Corazón Cósmico de la Creación pueda permanecer imperturbable en lo que concierne a la Idea. Las Ideas Divinas no son alteradas a medida que emanan de su Fuente; a medida que las Ideas Divinas descienden gradualmente hacia la Séptima Esfera de Perfección sobre el planeta; de lo contrario, los individuos que habitan en la Tierra, al no haberse purificado lo suficiente, literalmente "volarían en pedazos" al tratar de sintonizar y usar el Poder de la Divinidad. Este proceso en espiral es la actividad misericordiosa de Dios Padre-Madre.
Extracto del libro: "Poder y Protección" de Hércules y Amazona.
Comments