Buscar
JESÚS EN QUMRÁN
- alecapuzzi
- 28 oct 2022
- 2 Min. de lectura
Jesús, como nazareno, perteneció a los esenios, una secta judía muy parecida a lo que después fueron los primeros cristianos. Los esenios rechazaban los placeres de la vida; hacían voto de castidad y celibato; eran abstemios; vivían sin mujeres, sin amor carnal y sin dinero; realizaban prácticas ascéticas muy duras, entre estas, la de ir a meditar a los desiertos, como lo hacia Jesús.
Los esenios eran muy piadosos y estaban dedicados a la oración y al estudio de lo que era la Biblia en aquel momento. Realizaban abluciones o purificaciones con agua, como el bautismo; practicaban el banquete sagrado con pan y vino, tal cual lo hacía Jesús; esperaban al Mesías; sus dirigentes se llamaban “obispos”, y tenían una comunidad sacerdotal. En Qumrán se hallan las ruinas de un monasterio esenio que, según muchos aseguran, estuvo relacionado con la vida de Jesús.

San Juan Bautista fue esenio; todas las características de su vida así lo demuestran.
En los Manuscritos del Mar Muerto, todos los nombres de personas y lugares están escritos en código o lenguaje simbólico, tal cual está narrada la Biblia, el libro más importante por el que ellos se regían. Dentro de este lenguaje simbólico, aparece el nombre de un personaje al que esconden bajo el título de “Maestro de Justicia”, que es mencionado frecuentemente y guarda una estrecha relación con la vida de Juan el Bautista, pues predicaba unas enseñanzas parecidas a las de él, decía que el mundo estaba al borde del pecado y que había que arrepentirse; a sus seguidores se los llamaba “Hijos de la Luz”.
[...]
Jesús se vistió con la túnica blanca del sacerdocio judío y rompió todos los esquemas, se rebeló contra la autoridad sacerdotal, atacó las componendas y los intereses sociales de la religión. oponiéndose abiertamente a los formalismos rituales y a la mañera de orar. Para más lío, andaba ofreciéndoles el Cielo a prostitutas, ladrones y cobradores de impuestos. Para la época, Jesús fue un auténtico revolucionario en temas de espiritualidad; por eso lo expulsaban de algunas sinagogas cuando predicaba y se tuve que ir de Nazaret a vivir a Cafarnaúm. Todo esto motivó que los esenios lo llamaran el “Sacerdote Impío”.
Texto extraído del libro "BIBLIA" Colección Metafísica Cristiana de Rubén Cedeño, publicado por Editorial Señora Porteña.
Comments