DESAPEGO DE SAN IGNACIO
Ignacio, después de ser herido y de pasar una cuarentena de retiro con lecturas espirituales en su casa-torre de Loyola, tomó la gran decisión de desapegarse de lo externo, el boato, y en 1522 salió rumbo a Tierra Santa. Pasó por Monserrat, montaña magnética donde, desde la Edad Media, se venera una milagrosa "Virgen Negra" conocida como "La Moreneta". Escribe San Ignacio que un día, víspera de la Asunción de María: "Decidí velar mis armas toda una noche, sin sentarme ni acostarme, sino a ratos de pie y a ratos de rodilla, delante del altar de Nuestra Señora de Monserrat, donde había determinado dejar mis vestimentas revistiéndome de las armas de Cristo".