Los valles y montañas que rodean a Belén son los altos y bajos de nuestra vida, antes de encontrar la realidad viviente de Cristo en nuestro corazón. Todos tenemos altos y bajos, los países también; pero por encima de esto se halla la Presencia de Dios, que puede sostenernos en las alturas en medio de los más grandes conflictos.
Extraído del Libro “ESPÍRITU DE LA NAVIDAD”, de Rubén Cedeño. Editorial Señora Porteña.
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