TRES GRANDES MAESTROS

Si se cree que el grupo donde se está agrede, hay que observar con humildad, si esto es cierto o es la persona, que está creyendo que lo están agrediendo, en todo caso esto induce al más grande aprendizaje y práctica que es cultivar y ejercer el Perdón hacia los demás y desenvolver la humildad.
Si supuestamente en el grupo no hay amor y hay competencia y agresiones, hay que observar y recordar que los defectos que se ven en los demás son los propios, por lo tanto hay que corregirse. Hay quien se puede preguntar: ¿Cómo se puede amar a alguien que agrede y maltrata? De eso se trata el Amor en la práctica del Cristianismo y Jesús lo instruye claramente: “Amen a sus enemigos, rueguen por sus perseguidores; así serán hijos del Padre que está en el cielo, porque Él hace salir su sol sobre malos y buenos y hace caer la lluvia sobre justos e injustos.
Si ustedes aman solamente a quienes los aman, ¿qué recompensa merecen? ¿No hacen lo mismo los publicanos? Y si saludan solamente a sus hermanos, ¿qué hacen de extraordinario? ¿No hacen lo mismo los paganos? Así vemos que las “Tres Joyas” o “Trisharana”, que son el Buddham o el Buddha o el Facilitador, el Dhanman o la Enseñanza y el Sangham o el grupo, siguen siendo nuestros más grandes maestros.