ARACNE - POR RUBÉN CEDEÑO
ARACNE
Por: Rubén Cedeño
Libro Grecia Iniciática
Aracne, era una discípula de Pallas Atenea, que un día se quiso separar de ella sin agradecerle, reconocer, ni deber su talento a su Maestra.
Atenea, le aconsejó modestia, humildad y rendición ante la Verdad de reconocer quién le enseñaba, a quién debía todo lo que sabía.
Ante la desobediencia, mal agradecimiento y traición, Aracne fue convertida en araña por Pallas Atenea y debió pasar el resto de su vida tejiendo.
Toda araña lo que hace es tejer redes para atrapar y chupar la sangre a sus víctimas.
Esto es lo que hacen las personas cuando se van de los grupos y quieren tener seguidores, atrapar con sus redes como cualquier Aracne, para hacer a las personas víctimas y chupar sus energías si darle nada a cambio para su verdadero crecimiento.
Por eso, las arañas son fruto de las “energías siniestras” y la antítesis de la Verdad que da la vida. Esto es relatado para que cada estudiante se cuide de no ser una Aracne y no reconocer lo que sabe a sus maestros.