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ACTITUD EN EL SENDERO - POR RUBÉN CEDEÑO

RUBÉN CEDEÑO RESPONDE A EDGAR SHAISTER Tánger-Marruecos, 9.11.2014

Muchas buenas personas desean hollar el sendero de santidad y ser asistidos por los Hermanos Mayores para profundizar más en el conocimiento y ser mejores auxiliares de la humanidad, ¿cuál es la actitud que deben asumir para lograr esta comunión con Ellos?

La actitud que debe asumir un verdadero discípulo espiritual hollando el “Sendero de Santidad”, para servirle a la humanidad asistido por los Hermanos Mayores es lo que se conoce como “Requisitos del Sendero”. No todas las escuelas u organizaciones espirituales exponen los requisitos del sendero. Algunas de las organizaciones que dan a conocer a los Maestros tienen como finalidad despertar el interés por la espiritualidad, ofrecer una alternativa de vida, pero los “Requisitos del Sendero” los ofrecen escuelas que no son muy populares ni públicas, ya que no a todo el mundo le interesa esto, aunque con la entrada de la Nueva Era se ha despertado mucho interés al respecto.

Los estudios de primaria son obligatorios en cualquier parte del mundo, incluso se ofrecen hasta gratis en casi todos los países, la secundaria es un poco más selecta, pero hacerse un concertista en un conservatorio, solista del ballet, un gran científico o el jefe de una empresa, eso no se ofrece como una opción apetecible para todo el mundo, es una especialidad y solo los que lo deseen ardientemente y están dispuestos, han de realizar el esfuerzo que esto significa y si están preparados para ello, tendrán acceso a esto. De igual forma es la opción de adoptar los “Requisitos del Sendero”, una suprema especialidad. Sí, esto es demasiado, no es para todo el mundo, para eso están muchas otras opciones para informarse de Dios, y los Maestros sin comprometerse mucho.

Los “Requisitos del Sendero” que siempre se han exigido, se exigen y se exigirán sea la era que sea, están expuestos en libros como “Los Yoga Sutras” de Patanjali, “La Luz del Alma” del Maestro El Tibetano, firmado por Alice Bailey; “El Bagavad Guita” de Lord Krishna, A los Pies del Maestro firmado por Krishnamurti, “La Voz del Silencio” firmado por Blavatsky, “Luz en el Sendero” firmado por Mabel Collins, “El Sendero del Discipulado” y “El Sendero de Iniciación” de Annie Besant, además de “Participante Espiritual”, “Primera Iniciación”, “Segunda Iniciación” y “Tercera Iniciación” de un servidor. Estos no son libros de solo lectura, son textos de cabecera para toda la vida, con los cuales se trata de ir adaptando la vida a lo que ellos recomiendan.

En la Nueva Edad se ha puesto más fácil la exposición y comprensión de algunos aspectos de la Jerarquía Espiritual y es de esta forma que se ha dado un conocimiento práctico del uso de los Rayos, ciertos datos sobre las vidas y retiros de algunos de los Maestros de Sabiduría, pero lo que no ha sido modificado y ni siquiera hay mención de alguna alteración para la Nueva Era, es todo lo concerniente a los “Requisitos del Sendero”, siguen siendo los mismos, porque la psicología de la humanidad continúa siendo la misma, el cambio de era todavía no ha alterado en esencia, radicalmente a la humanidad, esta sigue con las mismas ambiciones, mentiras, inconstancia, maldad, falta de sensibilidad en muchas cosas. Y todo esto tiene que ser transformado radicalmente. Algo ha cambiado, pero le falta mucho todavía. La actitud en el Sendero la vemos claramente reflejada en la vida de muchos santos de diferentes religiones y por eso me he abocado a escribir la vida de muchos de ellos recalcando sus actitudes como ejemplo para todos los que buscan a Dios. Vidas ejemplares de la “Actitud en el Sendero” es la vocación de servicio a los demás de la Madre Teresa de Calcuta; un ejemplo de persistencia y transmutación de la personalidad es Milarepa; un modelo de humildad suprema es San Francisco de Assisi; un patrón de espiritualidad universal es Ramakrishna; una pauta de simplicidad es Santa Teresita del Niño Jesús; un prototipo de perdón a toda costa es el Maestro Jesús y así tantos otros discípulos ejemplares. Es muy hermoso plantearse en la vida de uno vivir de acuerdo al “Sendero Espiritual”, es lo más grato y útil que se puede hacer con la vida, todo lo demás, la familia, la profesión, los amores, pasan, hacen terminar en soledad, el Sendero no acaba nunca y su finalidad es la Bienaventuranza en Dios. ¡Si Dios te dio en tu vida la fortuna de amarlo, es tu op